
La historia, la Visión y la Estrategia.

“Solo hay dos fuentes de ingresos: personas que trabajan y dinero que trabaja.”
—R. Nelson Nash, autor de Conviértete en tu propio banquero®
Antes de que el Infinite Banking Concept® (IBC) se convirtiera en una estrategia financiera enseñada en todo el mundo, fue una idea silenciosa pero poderosa en el corazón de un hombre:
R. Nelson Nash.
Él no era un ejecutivo de Wall Street ni un multimillonario. Era silvicultor, empresario y, sobre todo, un creyente en la responsabilidad personal.
Lo que descubrió no fue solo un producto:
fue una mentalidad.
Una manera radicalmente distinta de pensar el dinero que desafiaba al sistema, empoderaba a las familias comunes y ofrecía un camino hacia la verdadera libertad financiera.
Su descubrimiento era simple, pero transformador:
“Financias todo lo que compras: o pagas intereses a alguien más, o renuncias al interés que podrías haber ganado.”
Una vez que lo vio con claridad, no hubo marcha atrás. Sabía que debía compartirlo.
Hoy, la estrategia que compartió ha ayudado a miles de personas a recuperar el control de sus finanzas mediante algo que a menudo se pasa por alto y se malinterpreta profundamente: el seguro de vida permanente (Whole Life).
Pero el Infinite Banking Concept® (IBC) no trata realmente de seguros.
Se trata de autonomía. Propiedad. De construir un sistema que trabaje para ti, no en tu contra.
Y todo comenzó con un libro, una idea y una misión:
ayudar a personas como tú a reclamar el control de su dinero y de su futuro.
Antes de convertirse en un movimiento global, el Infinite Banking Concept® (IBC) fue presentado en un libro sencillo y revelador: Conviértete en tu propio banquero® de R. Nelson Nash.
No es un libro sobre vender seguros.
Es sobre recuperar el control.
En sus páginas, Nash expone las trampas financieras que mantienen a las personas estancadas: impuestos, intereses, costo de oportunidad y cómo escapar de ellas construyendo tu propio sistema bancario privado mediante una póliza de vida entera especialmente diseñada.
Explica:
Por qué los bancos siempre ganan y cómo cambiar las reglas del juego.
El verdadero costo de financiarlo todo a través de terceros.
Cómo crear un sistema en el que tus dólares trabajen para ti una y otra vez.
Los “problemas humanos” que impiden acumular riqueza (y cómo superarlos).
Es una lectura breve, pero su impacto dura toda la vida.
Más que una estrategia, Conviértete en tu propio banquero® es una llamada a despertar. Un cambio de mentalidad. Una invitación poderosa a dejar de depender de sistemas rotos y empezar a tomar el control total de tu vida financiera.
“Financias todo lo que compras: o pagas intereses a alguien más, o renuncias al interés que podrías haber ganado.”


El Nelson Nash Institute (NNI) fue fundado para proteger, enseñar y expandir el mensaje que Nelson Nash compartió con el mundo: que las personas comunes pueden retomar el control de su vida financiera al reclamar la función de banquero usando seguros de vida entera.
El NNI es más que una plataforma educativa: es un faro de claridad en un mundo financiero lleno de "ruido". Dirigido por economistas, asesores y practicantes apasionados, el Instituto existe para asegurar que el Infinite Banking Concept® se enseñe con integridad, precisión y profundo respeto por su origen.
A través de su Programa para Practicantes (Practitioner Program), el Instituto forma y certifica a asesores que sostienen los verdaderos principios del IBC. Como IBC Practitioner certificada por el Nelson Nash Institute, asumo esa responsabilidad con orgullo y con una misión clara: proclamar y compartir este mensaje de libertad financiera con la comunidad de habla hispana: desde las comunidades latinas en Estados Unidos hasta empresarios de México, Centro y Sudamérica con operaciones en Estados Unidos y Canadá.
Porque esto no se trata solo de vender pólizas: se trata de ayudarte a diseñar un sistema financiero que funcione en la vida real y perdure por generaciones.
Nota: Esta estrategia y sus implementaciones están disponibles solo en Estados Unidos y Canadá.
